viernes, 13 de agosto de 2010

Operación grua en el centro

Otro descalabro a la economía

Por Antonio Franco

Reynosa, Tam.- Con el apoyo de los elementos de Transito Local, decenas de vehículos que son mal estacionados en las principales calles, avenidas y sobre todo en el centro de la ciudad, están siendo enviados cada día a los corralones autorizados para este propósito, buscando con esta medida reordenar el trafico y combatir el supuesto influyentísimo de algunas personas.

En un recorrido por varias vialidades, se logró detectar que no son pocos los automovilistas que dejan en lugares prohibidos sus unidades motrices o en doble fila, y que al regresar de su trabajo y de efectuar compras se encuentran con la desagradable sorpresa de que su vehículo ya no se encuentra en donde lo dejaron creyendo en la mayoría de los casos que se los robaron, aunque después reflexionan y se dan cuenta que se lo llevó la llamada Operación Grúa.

Debido a esta actitud de los supuestos influyentes, para recuperar su vehículo primero tienen que confirmar si efectivamente se lo llevó la grúa, localizar el corralón a donde fue enviado, y después pagar el costo de los servicios que están concesionados a particulares, y después pagar la multa correspondiente, lo que se traduce en cuentos de pesos y en pocas palabras en un fuerte descalabro para la economía.

Pese a que se pierde mucho tiempo en los tramites de recuperación del vehículo, y a los gastos administrativos que se tienen que hacer, y el pago de la sanción económica, muchos automovilistas y choferes del transporte del servicio de carga continúan estacionando cada día su unidad en lugares donde esta prohibido estacionarse, o en doble carril la mayoría de las veces, situación que de inmediato es detectada por los agentes de transito Local y encargados de las grúas para llevárselos al corralón.

Como es natural, en todos los casos los afectados han expresado su malestar por los trastornos que esto les ocasiona, pero insisten en estacionar sus vehículos en lugares prohibidos desafiando a la autoridad.